Hoy en día todos buscamos tener una vida mejor, una mejor casa, un mejor estatus socioeconómico o un mejor puesto de trabajo, por eso términos como “workaholic” están muy de moda, donde los trabajadores dan un esfuerzo extra en la realización de su trabajo, aunque también existe la sisfemia que es un padecimiento similar.
Estrés laboral, ansiedad, síndrome de Burnout o adicción al trabajo “workaholic” son problemas de salud mental asociados al trabajo, a ello se suma la sisifemia, un vocablo que describe otro trastorno laboral que afecta a personas muy obsesionadas con su trabajo y que se manifiesta con un agotamiento psíquico y físico que puede derivar en otras patologías.

Quienes tienen sisifemia son personas vinculadas y relacionadas al perfeccionismo y probablemente ambiciosas por el trabajo, con ganas de crecer, conforme el padecimiento se va desarrollando puede convertirse en una obsesión, por lo que no dejan de trabajar y piensan que pueden haber hecho más y que podrían haber hecho mejor.
Los afectados hacen un esfuerzo heroico y hasta sobrehumano, pues alargan la jornada laboral con horas extra muchas veces no reconocidas o se llevan trabajo a casa, con el propósito de dar cumplimiento diario a esas labores inalcanzables que no pueden dejar pendientes y con la firme convicción de que al día siguiente ocurrirá lo mismo.

Algunos síntomas de la sisifemia:
- Cansancio mental progresivo: La persona con sisifemia se encuentra agotada mentalmente, por lo que disminuye su capacidad para prestar atención, fallo de memoria.
- Aislamiento social. Tanta dedicación al trabajo puede llevar al aislamiento social, puede darse cambios en el comportamiento, como pérdida de interés en actividades de ocio, deporte o las relaciones personales.
- Trastornos psicológicos: Si el padecimiento continúa con el tiempo pueden aparecer cuadros de ansiedad, depresivos, de angustia y trastornos de sueño.
- Dolencias físicas relacionadas: Además de agotamiento físico la sisifemia puede provocar desde dolor de cabeza y dolor de espalda, hasta arritmias, hipertensión y problemas en la piel e incluso cuadros de infartos, obesidad y diabetes.
Las diferencias entre la sisifemia y burnout:
- La sisifemia se traza objetivos inalcanzables y tiene largas jornadas laborales, mientras que el burnout es estrés crónico y no se siente con el reconocimiento necesario.
- Tiempo: La sisifemia aparecen en jóvenes y trabajadores de reciente incorporación, el burnout aparece tras una larga carrera profesional.
- Sintomas: En la sisifemia se presenta la angustia, ansiedad y obsesión por el trabajo y el burnout presenta desmotivación y agotamiento emocional.
Para tratar la sisifemia y otros trastornos similares, las empresas y los trabajadores tienen que trabajar de la mano, porque el empleado está perjudicando su propia salud y su desempeño profesional.

Fuentes: Consumer, Ecosfera, El Nacional