Una de las pesadillas de todo trabajador es tener trabajo pendiente o acumulado, ya que esto hace que no te concentres en tus demás actividades y pueda llegar a ocasionar un bajón en tu desempeño tanto laboral, como personal. 

Ser productivo en el trabajo no significa hacer trabajo de más, significa hacer tus labores correspondientes en tiempo y forma, lamentablemente la excesiva carga de trabajo hace que en algunas ocasiones tengamos trabajo pendiente, es por eso que te damos algunas estrategias para terminar el trabajo pendiente adecuadamente. 

• Levantarse temprano: Levantarse temprano puede ser un gran comienzo, poner el despertador 10 minutos antes de lo habitual, puede ayudarnos a mejorar nuestra rutina, esos minutos extra pueden convertirse en una mejor alimentación o actividad que nos ayude a mejorar nuestro rendimiento. 
• Haz lo más difícil por la mañana: Se recomienda empezar por lo que menos tienes ganas de hacer y hacerlo a la primera hora, tu mente está más fresca y terminar la tarea más indeseable incrementa tu autoconfianza. 
• Una cosa a la vez: Un estudio de la Universidad de Stanford afirma que hacer varias cosas al mismo tiempo es menos productivo que ocuparse de una sola tarea, ser multitask reduce tu eficiencia y tu coeficiente intelectual.    

Recuerda que tu cerebro solo puede realizar una tarea de manera exitosa a la vez, si te esfuerzas por hacer dos o más cosas al mismo tiempo lo harás más lento y con menor calidad. 

• Enlista tus tareas por orden de prioridad: Puedes aplicar la de escribir con tinta roja las tareas más urgentes o de alta prioridad, en negro aquellas que pueden esperar un poco y en azul las que tienes tiempo de sobra para poder entregar, al finalizarlas no olvides tacharlas, esto te da una sensación de logro.  
• Desaparece por una hora: No siempre puedes alejarte de las distracciones, pero es recomendable desaparecerte por una hora, para despejar la mente, pon en silencio tu teléfono, cierra tu sesión de redes sociales, cierra tu correo. 
• Utiliza el método 25-5: Divide tus sesiones de trabajo en dos partes: la primera consiste en 25 minutos de trabajo ininterrumpido y la segunda de 5 minutos de descanso. Esta dinámica permite al cerebro descansar y concentrarse mejor. 
• Usa la palabra “No”: Evita descuidar tus ocupaciones para atender las de otros, lo peor que puedes hacer es llenarte de actividades adicionales para tratar de complacer a los demás. 

Es inevitable que en alguna ocasión se te acumule trabajo atrasado, sin embargo, existen técnicas que sirven para realizar de manera más rápida y eficaz las tareas, así ya no te sentirás tan agobiado y podrás hacer tus actividades con calma y normalidad. 

Fuentes: OCC

 @AgendaGodinez