El empresario Bill Gates decía que “los líderes son aquellos que impulsan a los otros”, y es que muchos jefes no son verdaderos líderes, ya que aunque uno tenga el papel de jefe puede no inspirar confianza entre los colaboradores y esto puede resultar muy perjudicial para el equipo de trabajo, ya que el jefe te tiene que dar una retroalimentación, pero si el jefe no está en sintonía con el equipo, no se podrá llegar a los resultados esperados.

Además de motivar y poner el ejemplo, uno de los mayores retos para un jefe es el de conservar a sus colaboradores, y conservar un colaborador no sólo implica aumentar su salario o cambiarlo de área, pues la nula comunicación con el jefe y no saber hacia dónde se dirige su trabajo están entre los principales motivos de renuncia, según un informe de la Society for Human Resources Management, ambas pueden resumirse en retroalimentación.
Existen herramientas más formales de retroalimentación que simplemente sentarse con un colaborador para informarle cómo está su trabajo, lo cual puede resultar poco asertivo y serio, herramientas como la retroalimentación de 360 grados ayudan a evaluar el trabajo individual, en equipo y actitudes, entre otros temas.
La retroalimentación 360 es una evaluación sobre el comportamiento y las habilidades de un profesional, y da al trabajador un conocimiento de sí mismo y una retroalimentación sobre su comportamiento de su jefe, miembros del equipo y compañeros.
En muchas empresas y organizaciones se realizan retroalimentaciones o “feedback” de forma constante,si eres jefe es importante que conozcas y revises errores típicos al dar retroalimentaciones y prepararte para que no cometas errores y que tu mensaje pueda llegar de forma correcta al trabajador.

Aquí te damos errores a evitar a la hora de dar retroalimentación:
- Falta de preparación: El error más común de dar “feedback” es no prepararse para ello, el jefe tiene que asegurarse de ir preparados para la revisión, si no van preparados sus comentarios no serán trascendentes.
- Falta de contextualización: Otro error común de las personas, es quedarse con las últimas impresiones del proceso e ignorar el contexto general, es bueno tener en cuenta el contexto porque si te quedas solo con lo último el panorama general se estaría dejando a un lado.
- Falta de reconocimiento: Cuando se reconoce a los trabajadores de una manera eficaz, automáticamente se refuerzan las acciones y comportamientos que las organizaciones desean. El propósito del feedback es alentar a sus colaboradores como para ofrecer una crítica constructiva a su desempeño.
- Falta de planificación: Es importante que los colaboradores sepan por adelantado no sólo que va a tener una revisión, sino cuando se llevará a cabo, esto les dará tiempo para preparar notas sobre cosas que les gustaría discutir, y les hará sentir que son miembros importantes de la organización.
- Ligar la revisión al salario de los colaboradores: Basar el salario y las compensaciones en las revisiones de desempeño es un error que muchas compañías cometen, una revisión tiene la intención de discutir el desempeño del empleado, no sus remuneraciones.
- No realizar reuniones de “feedback”: El peor error que pueden cometer los jefes, es no dar ninguna retroalimentación en absoluto, el tener sólo una reunión de “feedback” al final del año no es suficiente, ni la mejor opción, es recomendable hacer reuniones constantes de retroalimentación, con esto la comunicación fluye con regularidad y así se mejora el desempeño de todos.
Un buen jefe y un mejor líder es el que da retroalimentación continuamente para que así todo el equipo de trabajo esté enfocado y se pueda llegar a los resultados esperados.

Fuentes: Expansión, HR Connect