El “tercer piso” (los 30’s, para quienes les falta barrio), algunos le tememos, otros lo sufrimos y hay quienes los añoran, y es que, esta edad es aún más difícil que la adolescencia; aquí ya todo empieza a doler, caerse y ponerse guango (no finjan, saben que es verdad). Y si algo la hace complicada, es el tener que volverse independientes, de todas las formas habidas y por haber; así que les vamos a contar algunas cosas que deberían estar haciendo, o debieron haber hecho con su dinero.
Fondo de emergencia: bien dicen las abuelitas: “estás bueno pa’ las emergencias”; es recomendable que tengan una cantidad destinada para estos eventos, no existe un monto exacto, pero se recomienda tener entre tres y seis meses de su sueldo, destinado a esta causa; a los 30 ya los deben tener; ¡sí amigos, sí!, ya están grandes de los pies.
Ponte un precio: la maldición Godínez es siempre trabajar y nunca tener dinero, porque no falta que seamos uno de los que más trabajan, todos lo saben, pero nadie hace nada; así que levántense de su silla vayan a la oficina de su jefe y pidan lo que merecen; no se dejen.
Ahorra para tu vejez: la palabra “jubilación” suena tan lejana que no le ponemos la debida atención, pero la juventud tampoco es para siempre, las aseguradoras recomiendan que hagamos aportaciones voluntarias de por lo menos el 10% de nuestro sueldo mensual, a nuestras cuentas de ahorro para el retiro; compren un cochinito, o guarden debajo del colchón esa cantidad.
No caigas en la lista de los morosos: cuiden su historial crediticio, podría ayudarlos en uno de esos momentos de peligro inminente, comiencen con una tarjeta básica que se adapte a sus ingresos y manténganse al corriente con sus pagos, así, con el tiempo, podrán ser acreedores a más y mejores productos financieros.
Invierte en ti mismo: no todo es ahorrar y gastar en banalidades; aumentar su nivel educativo con diplomados, maestrías y algunos otros estudios de posgrado, les asegurarán un futuro con más y mejores oportunidades, claro no dejen la salud a un lado, vayan al gimnasio, al médico, o incluso tomen vacaciones; a los 30’s las cosas se disfrutan diferente.
Sabemos que estos consejos son básicos, pero les ayudarán a tener una mejor visión, de lo que podrían hacer con esos años; por ahora así la dejamos.
¿Conocen otros? Déjenlos en los comentarios.