Desde tiempos inmemorables el arte y las mujeres guardan una estrecha relación, ellas han sido fuente de inspiración de grandes obras, tanto que, en la actualidad son quienes dominan este mercado; por ello, en esta ocasión les contaremos quiénes son las mujeres con las piezas más costosas de la historia.
Frida Kahlo: Es sin duda, parte importante en la historia del arte nacional, e icono de la cultura pop. Su obra “Dos desnudos en el bosque (La tierra misma)”, de 1939, se cotiza en 8 millones de dólares; el trabajo de la mexicana tiene un alto valor.
Agnes Martin: Las obras de la canadiense tienen un gran valor por ser pioneras en el arte minimalista; “Orange Grove”, obra de 1965, tiene un precio de 10.7 mdd y en 2013, su última obra: “The Beach”, fue vendida por 6.5 millones de dólares.
Cady Noland: La escultora conceptual posmoderna, tiene una carrera que se debate entre la fama y el anonimato, su obra “Bluwald”, fue vendida en 9.7 millones de dólares; el trabajo de crítica social de Nolad, está tomando fuerza en el mercado, en los últimos años.
Berthe Morisot: El impresionismo es una de las corrientes artísticas con gran presencia en nuestros tiempos, un claro ejemplo de ello es el trabajo de Morisot, cuya obra más valiosa es: “Après le Dejeuner”, de 1881, vendida en 10.9 millones de dólares.
Georgia O’Keeffe: Sus obras tiene algo más que el valor monetario, ya que en cada una traslada los recuerdos de su infancia rural, en pinturas abstractas, de las que “Jimson Wedd/ White Flower No. 1” es la más valiosa, al ser comprada por 44.4 millones de dólares.
Tamara de Lempicka: Considerada como una de las mejores exponentes del Art Deco, la polaca tiene un estilo único para la concepción del cuerpo humano, y los 8.4 mdd que vale su obra: “Le rêve (Rafaela Sur Vert amo)” de 1927, lo ponen de manifiesto.
Joan Mitchell: Miembro del movimiento abstracto expresionista, el trabajo de Mitchell es exhibido en las principales galerías de EUA y Europa; 11.9 millones de dólares fue el precio de “Sin título” de 1960, superando las expectativas de la crítica especializada.
Natalia Sergeevna: Con una mezcla de cubismo y fauvismo, Sergeevna plasma el folclore ruso en sus obras; con el paso del tiempo transformó su arte al cubo-futurismo; su obra más afamada es “Les fleurs”, de 1912, la cual alcanzó 10.8 millones de dólares a la venta.