“Ojalá ya depositen” son las palabras que más dices a final de cada quincena. Niegas salidas, evitas cualquier situación que te haga gastar más dinero del necesario y te encanta cruzar la línea entre el “pues para qué trabajas” y el “debo ahorrar”.
Necesitas un fondo de ahorro porque cuando surge un imprevisto, siempre entras en problemas. Claro, nunca falta el amigo o familiar que te ayuda a salir del aprieto, pero una parte de ti ya está cansada de siempre pedir prestado.
Todos decimos “este mes sí voy a ahorrar” y luego se presenta una oferta o un producto nuevo. Y el ahorro ya no existe otra vez. Es por eso que, como cualquier Godínez responsable, debes crear un fondo de ahorro destinado sólo para emergencias o imprevistos.
Recuerda que ahorrar nunca está de más y te quitará un peso de encima, aunque no será nada fácil. Debes hacer algunos sacrificios y decirle adiós a los gastos hormiga, pero no te preocupes, todo será por tu estabilidad financiera y eso vale mucho más que cualquier antojito del momento.
Lo primero que debes hacer para crear un fondo de ahorro es calcular tus gastos fijos mensuales como renta, comida, transporte, servicios, etc. Debe ser una cantidad con la que te sientas cómodo y no ajustado.
Ahora viene la parte difícil: ahorrar. Porque no basta con que ahorres un mes y ya está, para que pueda considerarse un fondo de ahorro debes contar tu gasto de 3 a 6 meses. Sé que suena mucho pero una vez que empieces a ahorrar se volverá un hábito y será más fácil.
También es necesario que consideres la accesibilidad a tu fondo de ahorro. En caso de una emergencia debes acceder a el con facilidad. ¡Y listo! Ya tienes un fondo de ahorro y quién sabe, tal vez si sigues ahorrando hasta puedas estar un año sin trabajar.
Fuentes:
https://www.bbva.com/es/py/cinco-razones-para-crear-un-fondo-de-emergencia-y-como-hacerlo/
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