El término Godínez, aunque inicialmente se usaba de forma despectiva y clasista, hoy en día ha evolucionado, aunque no exclusivamente, para describir a la mayoría de los oficinistas mexicanos con un horario de 9:00 am a 6:00 pm, de lunes a viernes.

El término se ha convertido en algo más extenso, que ya no es posible usarlo solamente para describir a una persona, sino que se refiere a ciertas actividades cotidianas; tantas, que seguramente casi todos hemos hecho alguna.

Es muy Godínez salir a comer con el gafete de la oficina, organizar convivios en la oficina o hablar demasiado del trabajo, fuera de éste.

Este estilo de vida de Godínez, genera algunos gastos que resultan imperceptibles, pero que al final terminan afectándote económicamente, estos pesos y centavos que no se cuentan y que impactarán en tu ahorro.

Falta de planeación

Preferir el estacionamiento que queda cerca, aunque cueste el doble o usar el taxi al trabajo, peor aún en Uber, porque como no lo pagamos en efectivo, parece que es gratis.

Salir a comer, porque no dio tiempo de preparar la comida y no es muy cómodo el llevar por todo el recorrido a la oficina los tuppers, con la incertidumbre que se pueda abrir uno y tirar la comida.

Pertenencia

Muchas veces se gasta en cosas, por el simple hecho de pertenecer, por formar parte de un grupo, como quien se inscribe al mismo gimnasio que sus colegas, para no quedar fuera del tema de conversación de alguna próxima carrera, en la que vayan a participar los compañeros de oficina.

Todas esas actividades que se podrían evitar, pero que se crean cierto tipo de obligación; ya sea por el miedo a perderse de algo o porque se piensa que si no se asiste, podría venir la clasificación antisocial.

Estatus

Por alguna razón, se piensa que el coche que tenemos, la bolsa o la corbata que se utiliza, es un reflejo de qué tan bien se está.

La situación de cada uno es distinta, pero si se busca hacer un cambio en el estilo de vida, es buen momento para reflexionar y ver cómo lograr un cambio.

@agendagodinez